GAJAPATI DE ODISHA — Solamente hay algo más grande que la fidelidad de un perro: su amor hacia sus dueños. Y así queda demostrado tras conocerse la noticia de la muerte de un bravo doberman que dio la vida para defender a la familia con la que convivía. El animal se enfrentó a cuatro cobras para evitar que entraran en la casa de sus dueños. Foto.
Todo sucedió el pasado fin de semana en la localidad de Sebekapur en la región Gajapati de Odisha, al este de la India. De madrugada, mientras un hombre llamado Dibakar Raita y su familia dormían, cuatro reptiles emergieron de la oscuridad con intención de entrar al hogar.
El perro, que vigilaba desde fuera la propiedad, se percató de la presencia de los intrusos y se enfrentó a ellos. A pesar de tener éxito en el combate, y de mantenerse firme y defender con fiereza la posición, el can no pudo evitar los mordiscos de las víboras, que inocularon veneno en su sangre, haciendo que finalmente muriera.
Cuando el cabeza de familia despertó a la mañana siguiente se encontró con un escenario dantesco: su perro fiel fallecido y cuatro cadáveres de cobras. La familia de Dibakar Raita se encuentra en estado de shock, pero también profundamente agradecida a su mascota: si no fuera por ella, es muy probable que alguno de sus miembros hubiera muerto.
Varios vecinos se han acercado al lugar de los hechos para dejar coronas de flores y homenajear así al doberman, que fue enterrado después de ser paseado en procesión por todo el pueblo. Sin duda, se merece salir de este mundo con todos los honores.
Todo sucedió el pasado fin de semana en la localidad de Sebekapur en la región Gajapati de Odisha, al este de la India. De madrugada, mientras un hombre llamado Dibakar Raita y su familia dormían, cuatro reptiles emergieron de la oscuridad con intención de entrar al hogar.
El perro, que vigilaba desde fuera la propiedad, se percató de la presencia de los intrusos y se enfrentó a ellos. A pesar de tener éxito en el combate, y de mantenerse firme y defender con fiereza la posición, el can no pudo evitar los mordiscos de las víboras, que inocularon veneno en su sangre, haciendo que finalmente muriera.
Cuando el cabeza de familia despertó a la mañana siguiente se encontró con un escenario dantesco: su perro fiel fallecido y cuatro cadáveres de cobras. La familia de Dibakar Raita se encuentra en estado de shock, pero también profundamente agradecida a su mascota: si no fuera por ella, es muy probable que alguno de sus miembros hubiera muerto.
Varios vecinos se han acercado al lugar de los hechos para dejar coronas de flores y homenajear así al doberman, que fue enterrado después de ser paseado en procesión por todo el pueblo. Sin duda, se merece salir de este mundo con todos los honores.
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