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ESPAÑA.- Las autoridades de la localidad de Benicarló, en la costa este de España, investigan la muerte de un hombre que presuntamente ingirió un producto de limpieza que le fue servido como vino blanco en un bar.
El producto de limpieza había sido guardado en una botella de vino que, por error, fue introducida en la heladera del establecimiento.
Al parecer, se trataba de un producto industrial de un color similar al del vino blanco, que le causó a la víctima graves quemaduras internas.
Según el relato de testigos de lo ocurrido, el hombre, quien era asiduo del establecimiento, tras tomar el primer trago se dio cuenta de que lo que le habían servido no era vino.
Al notar que le quemaba la boca bebió agua, lo que pudo haber empeorado las cosas, al hacer que el detergente llegara hasta el estómago.
Los servicios de emergencia trataron de reanimar al hombre, que fue trasladado con pronóstico grave a un hospital local, donde posteriormente falleció.
CHINA.- Zhou Zhidong, un policía de 45 años, falleció de repente por un paro cardíaco después de trabajar 24 horas seguidas.
Zhou y otros tres policías habían trabajado en más de 10 casos y capturado a 5 sospechosos desde las 8:30 de la mañana hasta las 5 del día siguiente.
Algunos de sus colegas lo encontraron en estado de coma y lo trasladaron de inmediato al hospital donde falleció.
Los médicos que lo asistieron diagnosticaron preliminarmente que la muerte fue causada por una enfermedad cardíaca súbita por el exceso de trabajo.
Tras el incidente, el Departamento de Seguridad Pública del distrito de Huidong intentó consolar a la familia de Zhou, designando a médicos para cuidar a los padres y la esposa del héroe.
NIGERIA.- Un tribunal de Nigeria le permitió divorciarse a un hombre de 57 años que alegó que su mujer le servía a menudo la cena demasiado tarde, informaron medios locales este jueves.
"Mi esposa ha fallado en sus obligaciones matrimoniales. Ella no prepara mi comida a tiempo y ya se lo había advertido varias veces, pero ella no me escuchó", sostuvo el esposo, Olufade Adekoya. "No tiene sentido albergar a una esposa que me hacer pasar hambre. Estoy cansado", añadió durante la audiencia, de la cual no se precisó la fecha.
Sin embargo, su esposa negó el presunto incumplimiento y acusó a su marido de tramar todo esto para casarse con otra mujer.
Pese a esto, el presidente de la corte de Lagos (suroeste), Olu Adebiyi, disolvió la unión al concluir que "la corte trató varias veces de reconciliar sus diferencias, pero todos los esfuerzos fracasaron".
Podría tratarse del primer caso en Nigeria en el que se concede un divorcio por problemas de este tipo, aunque no es el caso de divorcio más extraño en este país africano.
En 2008, un jubilado nigeriano cedió a las presiones de líderes islamistas locales para que se divorciara de 82 de sus 86 esposas para evitar una orden de desalojo bajo el sistema jurídico de la Sharia.
En otro caso publicado por el diario en internet Sugar Daily, un empresario de 32 años habría pedido el divorcio horas después de casarse al descubrir que su esposa llevaba puesta una almohadilla "levanta nalgas" para aumentar el tamaño de su trasero.
En otro insólito caso en Lagos, una esposa obtuvo el divorcio después de denunciar que su esposo a menudo defecaba en las ollas de la cocina cuando estaba borracho.
Asimismo, un carpintero de 40 años pidió ante una corte disolver su matrimonio de 5 años porque sus cuñados intervenían en repetidas ocasiones cuando le pegaba a su mujer.
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